Allegri alíneaba sobre el tapete de San Siro al veterano Abbiti en la puerta; defensa de cuatro formada por Abate, Mexes, Thiago Silva, Antonini; trivote formado por Van Bommel, Seedorf y Nocerino; Boateng enganchando con un taque formado por Robinho e Ibrahimovic.
Wenger apostaba por Szczesny en portería; Sagna, Koscielny, Vermaelen, Gibbs en defensa; Song, Rosicky y Arteta en la sala de máquinas "gunner"; Walcott y Ramsey en la mediapunta; Robin Van Persie la referencia ofensiva del Arsenal.
Aunque no empezó con suerte el Milan pues a los diez minutos de partido se tendría que retirar lesionado Seedorf dando entrada a Emmanuelson pronto se harían con el control del partido a base de goles los de Allegri. Un balón de Nocerino para Boateng que controlaría con el pecho y sin dejar que botase mandaba la pelota al larguero para que acabara entrando a gol, otro golazo del ghanés en esta Champions. No se veía a un Arsenal que tuviera las ideas claras o facilidad alguna llegando al ataque, todo lo contrario, le costaba mucho trabajo crear cualquier jugada ofensiva. Cerca del descanso una cabalgada de Ibrahimovic por banda izquierda entrando al área ponía un centro al área donde llegaba Robinho que de cabeza se lo ponía lo más lejos posible del alcance de Szczesny haciendo el segundo gol.
Wenger echaría mano de Henry para intentar recortar distancias al comienzo de la segunda parte pero la película no había cambiado nada tras el descanso el Milan sin hacer un gran juego conseguía neutralizar al Arsenal a base de recuperaciones de balón en el centro del campo y rápidas trancisiones de balón. Tan solo cuatro minutos después del comienzo de la segunda mitad Ibrahimovic conseguía habilitar a Robinho en la frontal del área que aprovecha el hueco que le dejó Vermaelen al resbalarse e hizo el tercero del partido. En el minuto 65 llegó la primera ocasión clara del partido para el Arsenal, un tacón de Henry para Van Persie que detenía un gran Abbiati. En el 78 otra buena jugada individual de Ibrahimovic dentro del área que le hace un buen recorte a Djourou y el internacional suizo no pudo evitar hacerle penalti que se encargaría de transformar el propio sueco, gol que se había estado mereciendo todo el partido siendo uno de los mejores del partido. El resto del partido el Arsenal tomo un poco más la iniciativa, en parte también por la actitud a esas alturas del juego más contemplativa del conjunto lombardo y llegó a tener Van Persie un buen remate de cabeza que paró Abbiati en un partido en el que no trabajó seguro ni la mitad de lo que esperaba.
Muy pobre partido del equipo de Wenger que salvo sorpresa mayúscula quedará eliminado en esta edición de la Champions League, ni Henry en la despedida de su equipo y de Europapudo hacer nada. El Milan autoritario vencedor en este "a priori" igualado partido de ida irá al Emirates con la tranquilidad del trabajo bien hecho y con la única preocupación de controlar la cómoda ventaja a favor que han conseguido en San Siro.
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