Wernbloom sorprende en el descuento al Real Madrid

Visita del Real Madrid a Moscú donde le espera el CSKA en los octavos de final de la Champions League. Los rusos, con la destacada baja de su portero Akinfeev tienen su mayor baza en el ataque en jugadores como Dzagoev o Doumbia, además del frío de sobra sabido por todos en la capital rusa, pero con una defensa muy lenta que contrasta con el ataque y sin ritmo de competición, ya que este es su primer partido tras su mini-pretemporada. Por parte, del Real Madrid, como curiosidad, la última vez que Cristiano jugó en el Luzhniki ganó una Champions.

Slutsky alíneaba para el partido más importante del año para su equipo a Chepchougov en la puerta; los hermanos Berezutski, Ignashevich, Schennikov en defensa; Aldonin, Wernbloom en el centro del campo; bandas para Tosic y Musa; Dzagoev enganchando con Doumbia.

Mourinho salía con todo en el Luzhniki para ir a por los cuartos, en portería Casillas; línea de cuatro defensas compuesta por Arbeloa, Ramos, Pepe y Coentrao; Khedira y Alonso en el doble pívote; tres mediapuntas; Callejón, Özil y Cristiano; Benzemá en la punta del ataque blanco.

El partido empezó con una mala noticia para el Real Madrid pues al cuarto de hora de partido tuvo que ser sustituido Benzemá que se lesionó al pegarle al balón y parece ser que sufrió una rotura, el francés tuvo que ser sustituido por Higuaín que al poco de entrar tuvo una buena ocasión que salvó el portero Chepchugov que volvió a parar el rechace que remató Khedira. Sin hacer el juego que en partidos anteriores le hemos podido ver al equipo de Mourinho si que tenían controlado el partido ante un CSKA que solo tuvo algo de mordiente en los primeros compases del partido. Con el paso de los minutos el conjunto blanco se fue haciendo más dueño del partido y a la media hora llegaba el primer gol, un centro de Coentrao, Tosic que despejaba de forma lamentable, el balón que quedaba en la frontal para Cristiano que le golpeaba con pierna izquierda adelantando al Madrid. En el resto de la primera mitad llegadas muy inocentes y sin mayores complicaciones para el Real Madrid.

Pudo ampliar la diferencia el Real Madrid en numerosas ocasiones por medio sobretodo de Cristiano, se sucedían las ocasiones para el conjunto blanco pero no llegaban los goles, Callejón en velocidad, Ramos de cabeza, Alonso aprovechando un rechace ono el propio Cristiano en un mano a mano que salvó Chepchugov no fueron capaces de volver a marcar. Mediada la segunda parte entraba el japonés Honda en el CSKA que le daba un poco más de profundidad y llegada al equipo ruso, eso si, solo una leve mejoría, sin cambiar demasiado con lo hecho en el primer tiempo. Ocasiones de sobra para el equipo blanco como para ganar bien el partido, pero si se perdona tanto siempre se acaba pagando, y así fue. El equipo de Slutski botaba una falta lateral por medio de Dzagoev la peinaba uno de los Berezutski para el otro hermano, el balón que quedaba muerto y Wernbloom remataba haciendo el empate en el minuto 93.

Empate final injusto, excesivo premio para un CSKA muy pobre que sin hacer mucho se ha encontrado un gol en el descuento, el Real Madrid pudo sentenciar, de hecho tuvo muchas oportunidades de hacerlo pero ahora lo tendrán que hacer en la vuelta, que será el 14 de marzo en un repleto Santiago Bernabeu en busca de los cuartos de final de su competición favorita, la Champions League.